CHUVA by ANNA PRATA

La lluvia no se dibuja sola.
Nace del encuentro perfecto entre el tiempo, la temperatura y el destino.

Así es esta colección.
No se impone, no fuerza la forma, no exige espacio.

Simplemente sucede.
No se trata de ser más. Ni de ser menos.
Sino de ser, exactamente, lo que uno es.
En constante cambio.
Cuando la forma no limita, libera.
Y cuando algo realmente nos conmueve, no necesita ser eterno; ya lo es.

La Colección CHUVA no habla de exceso ni de ausencia.

Habla de lo que llena, sin pesar.
De lo que deja huella, sin contener.
De lo que llega y permanece, de alguna manera, en quien lo experimenta.
Porque la verdadera belleza no ocupa espacio. Simplemente se asienta.